Secretos

¡¡¡Shuuuuuuu!!! No me lo cuentes ahora, no quieras desvelarme todos tus secretos en este momento, calma, que sé que quieres decirme cosas que no puedes, cosas que no debes, cosas que crees que son importantes cuando realmente no lo son igual para todos, para mí no.

Qué manía la nuestra de querer contar las cosas a destiempo, en un momento que no procede, en un lugar no adecuado para eso. Los secretos llevan sus llaves y deben ser abiertos despacio para tirar la llave en la corriente de un agua que llegue hasta el océano de la libertad. Una libertad que se que tú anhelas, al igual que todos, donde deben acabar las verdades.

“Confianza no es saber todo del otro, es no necesitar saberlo” – leí el otro día. Y me parece una gran verdad. A las personas, bueno no sé qué habrás vivido cuál será tu historia, no nos importa lo que vemos, yo si sé que hay más allá. Yo sí creo en ti, no por lo que me muestras cuando estás enfrente de mí, ahí sé que solo es una máscara que te has creado, una auténtica coraza para no mostrar lo bonito que tienes (lo demuestras de otras maneras). Ya sé que sientes miedo por el daño que te hayan hecho, por lo que has sufrido, por las lágrimas que has derramado, por tus secretos guardados, pero todos también lo tenemos, no eres tú solo/a, a mí también me pasa, nadie es perfecto.

Pero ya está… no pasa nada, solo debes volver a creer, despertar de nuevo, volver a confiar en la persona que tienes ahora delante, pero eso sí, si sabes reconocer por ti mismo/a lo que realmente sientes, sin esconderte debajo de nadie e incluso de ti,  no tendrás que volver a sufrir. Solo es verdad aquello que de verdad sientes.

No será fácil, quien dice que la vida lo sea, pero no hace falta que finjas, no hace falta que te vuelvas esclavo de nadie o que te ocultes sobre su ala porque tú no sepas cómo hacerlo, es más fácil de lo que crees, solo necesitas tus palabras auténticas, y esas a ti te sobran, porque yo sé que están ahí, porque no puedes seguir mintiendo, ya que eso es peor para ti, no te hace ningún bien y eso, de algún modo, me preocupa.

 

Porque no lo intentas, venga, es muy fácil, ¿te enseño?

Solo tienes que hablar de ti, sin miedo. Dime que es lo que te hace reír, lo que te gusta, cuál es tu comida favorita, con lo que te diviertes, lo que anhelas, lo que necesitas, lo que te gustaría hacer, con que sueñas, dónde te ves de aquí en diez años, que te gustaría sentir, con quien estarías al lado, cuál son las debilidades que tanto te hacen daño para cambiarlas a fortalezas, seguro que lo que tú crees que es importante luego no es para tanto y si lo fuera que pasaría… ¿Y, qué? Hay otras opciones, como me has dado tú la lección.

 

Venga que lo estás haciendo muy bien, yo tampoco soy perfecta y no tengo las respuestas en el momento que tú me preguntas (siempre necesito pensar la respuesta más tiempo), ni tengo la llave que abre todas las puertas, está claro, pero si sigues así seguramente lo consigas.

Shuuuuuu… no cuentes todo de golpe con preguntas inoportunas, no quieras ir rápido por querer conocer el destino, eso no es auténtico, eso no es la verdadera magia, eso pierde la gracia al poner las reglas que tú crees para manifestarlo, querer controlar todo el tiempo, eso te hace perder ¡¡¡eso es!!! Solo acepta quien eres, que no es lo que quieres demostrar haciendo falsos los momentos para que los demás estén contentos, para hacer trucos que solo disfrazan tu realidad, no muestran la auténtica verdad.

Dar con alguien que sabe un poco más te puede ayudar a liberarte, por eso ves despacio, no quieras saber todas las respuestas en los momentos que no te corresponden, eso hace robar  las cosas que llevan su tiempo, las cosas están pensadas para que pasen cuando tienen que pasar, no te crees expectativas que no son verdaderas, porque eso solo te hace sufrir, y seguro hayas sufrido más de la cuenta por mostrarte como eres, y por eso te da miedo, a mí me pasa lo mismo. Te diría tantas cosas, te daría tantas respuestas, pero para qué, si eso lo tienes que descubrir por ti, pero hazme un favor, tú que tanto sabes de todo (lo que aparentas), no des por supuesto tu realidad, siempre hay que saber cerrar los ojos y leer entre líneas y dar un paso más allá.

Hoy aprendí, después de pasar más tiempo contigo, que no escuchas mas allá de las simples palabras, que todavía te hacen daño tus sentimientos, que no te fijas en los pequeños detalles (bueno si en lo que tú crees importantes para ti pero no para los demás) que no sabes divertirte por miedo a sentir cosas diferentes, que no entiendes que la vida no te va a mostrar todo como tú quieres (te crees dueño/a del destino, eso es jugar sucio), porque aunque lo tengas delante de tus ojos nunca vas a estar conforme, nunca vas a sentirte satisfecho del todo.

No sé la verdad si yo podré ayudarte, no sé si quieres contarme tus secretos, si quieres confiar en mí tus palabras, tus silencios, también comunican, siempre estamos comunicando deberías saberlo.

Yo hace tiempo que he decidido ser valiente, a mi manera, y por eso si quieres yo te guardo tu secreto hasta que decidas soltarlo en el mejor momento, ya que la magia existe en el momento en que eres coherente con lo que piensas, dices y haces.

Un abrazo al corazón

Firma Isabel

ÚNASE A NUESTRO BOLETÍN
I agree to have my personal information transfered to MailChimp ( more information )
Únase a nuestros visitantes que reciben nuestro boletín de noticias .
Odiamos el spam. Su dirección de correo electrónico no será vendida o compartida con ninguna otra persona.

Artículos relacionados

Tres tipos de valores universales
14º Día de Posibilidad
Ábreme la puerta

Sin comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

+ 15 = 20